TU CUERPO ESTA CAMBIANDO

Quizá ya lo estés viviendo pero debes conocer los cambios y adaptaciones que experimentará tu cuerpo durante el embarazo, trimestre a trimestre. Lo primero que debes saber es que es algo normal, es la fortuna de preparar el cuerpo para albergar a tu hijo durante los siguientes nueve meses. Estos son algunos de los mas comunes:

  • Cambios mamarios y genitales: aumenta la vascularización de las mamas, su tamaño y se oscurece la aureola. La vulva estará edematizada y más vascularizada.
  • Sistema Cardiovascular: aumento del volumen sanguíneo, de la frecuencia cardíaca en reposo y caída de la presión arterial.
  • Sistema respiratorio: mayor consumo de oxígeno, sensación de falta de aire o disnea.
  • Sistema Urinario: aumenta la formación de orina, se dilatan los uréteres. Tendrás más ganas de hacer pis.
  • Aparato locomotor: el incremento de peso hace que se adelante el centro de gravedad, cambiará la postura modificando las curvas de nuestra espalda y solicitando un trabajo extra a la mayor parte de nuestros músculos. Relajación de la musculatura abdominal, y mayor laxitud articular por acción de la hormona relaxina

Todos estos cambios, unidos al big-bang hormonal, pueden venir acompañados de molestias más o menos importantes que debes indentificar y, en el caso de que se agraven, consultar a tu profesional.

 

MOLESTIAS MAS FRECUENTES

Aunque puede ser qe no las experimentes, conviene estar familiarizada con las mas comunes durante el embarazo.

  • Mareos, náuseas e insomnio, mas frecuentes en el primer trimestre.
  • Sensación de falta de aire o disnea
  • Estreñimiento
  • Dificultad del retorno venoso con aparición de varices en piernas o incluso en tus genitales, hemorroides.
  • Posibilidad de perdidas de orina asociadas a esfuerzos.
  • Calambres musculares, dolores en espalda, hombros, pelvis, parte posterior de las piernas, etc…

TU MEJOR ALIADO

Sin duda, el deporte en el embarazo es la mejor opcion para combatir la mayor parte de las molestias. La práctica de ejercicio físico durante el embarazo ha demostrado en diferentes estudios que es beneficioso para todo esto.

  • Disminuir la incidencia de la diabetes gestacional
  • Controlar la ganancia de peso
  • Disminuir la incidencia de algunas complicaciones del embarazo como la preeclamsia
  • Mejorar la capacidad funcional en tu vida diaria
  • aliviar las molestias y dolor lumbar
  • Mejorar el bienestar psicológico durante todo el embarazo

¡¡ No hay ningún medicamento que pueda conseguir todos estos beneficios y que ademas no presente efectos secundarios !!

VE AL FISIO

No dudes en incluir en tu equipo de preparación al parto a un fisioterapeuta especializado. Van a ser unos meses muy importantes en tu vida y el profesional podrá guiarte en la progresión del ejercicio terapéutico a realizar en este período, centrando su trabajo en aquellas estructuras mas solicitadas y cuyo papel sera esencial en los próximos meses.

  • Ejercicios de control motor para trabajar la postura correcta y minimizar así las molestias musculares
  • Trabajo específico de las musculatura abdominal profunda. El músculo transverso abdominal es el gran protagonista, pues funciona como una faja natural que te ayudará a «llevar el bebé en alto», protegiendo tu espalda y periné.
  • Descubrir tu suelo pélvico: si aun no lo has echo, el embarazo es el momento perfecto para averiguar su importancia. Tras una valoración adecuada, tu fisioterapeuta te ayudará a prepararlo para el sobreesfuerzo del embarazo y para la prueba final, el parto. Tener esta zona tonificada será clave para un embarazo saludable. El masaje perineal te ayudara a estar en las mejores condiciones posibles para el día del parto.

¿ Por donde empezar?

Estas son las pautas de una buena preparación para el parto y que podrás entrenar con tu fisioterapeuta

  • Informarse del proceso y del procedimiento que se aplica en el hospital en el que se vaya a parir. Sí, a veces la madre puede elegir.
  • Trabajar las posturas y la respiración para la fase de dilatación del cuello uterino(apertura), puede durar muchas horas y se caracteriza por la existencia de contracciones uterinas, rítmicas y dolorosas. El movimiento en esta fase puede ser esencial para acortar la duración de la misma y aliviar el dolor de la madre. Se practican posturas diferentes buscando la que mejor se adapte a cada mujer. Todas pretenden a liberación de la pelvis materna, la elongación de la columna y sobre todo la mayor comodidad de la madre. No olvidemos que el movimiento en esta fase ayuda también al descenso del bebé.

Dra. Beatriz Martínez Pascual

Profesora de la Universidad Europea de Madrid
Fisioterapeuta especialista en la Clínica OnelifeCenter